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Ya no me importa cuando deba,
si son uno, dos o miles de kilòmetros,
lo unico que pido es poder llegar a tu corazòn...


recuerdo fuertemente,
aquellas noches estrelladas de invierno,
donde intercambiamos sonrisas,
miradas,
palabras,
te he tenido proximo a mi alma,
sintiendo que me brindaste calor y luz,
abriendo mi pecho, a nuevos sentimientos...

una mañana de sol,
imaginè un mundo pintado de dos frases
"tu y yo",
respondiendo a mi vasta utopìa,
llena de fervor,
de que nazca ese amor que siento hoy por hoy,
solo por vos...

aunque no lo creas,
aunque no lo sepas,
dejaste plasmada una enorme huella,
por culpa de tu mirar lleno de fuego,
que no se puede con todo el agua del planeta,
siquiera, apagar en mí...

tube el privilegio,
de dejarme seducir,
por tu aroma a dulce joven,
por la ternura de tu ser,
que encandilò mi mente,
que conmoviò mis momentos,
todos aquellos,
que no puedo olvidar...


pude sentirte, acariciando mi roto corazòn,
con simples palabras,
gestos,
que tu no persiviste,
que llenaron mis ojos de emociòn,
te mirè entre sueños,
sentì tu piel, suave como la brisa en primavera,
sentì sus manos,
pequeñas, acojedoras,
llenas de protecciòn...
te robè una sonrisa,
escuchè latir tu corazòn en mis oidos...
y eso provocò verte mas ampliamente...
derramè lagrimas cuando sentì tus penas, por una ilusiòn imposibles,
te abrazè con devociòn, sentì desplegadas tus alas de angel frente a mi rostro...
y destellaste mis ojos con ese haz de luz incandecentes que brindàs,
llenos de blancura perpetua...

dìa a dìa trato de poder llegar a tu persona,
cediendo mi espìritu a vos,
otorgandote lo mejor de mi sonrisa,
siguiendo,
imaginando,
que existirà un momento en el que puedas mirar,
darte cuenta de ello,
y brindarme eso,
que a gritos pido de vos,
el dìa que puedas tomarme de la mano,
y llevarme a recorrer tu mundo,
tu entelequia,
tu yó...


simples palabras,
de una adolesente ilusa,
que desea gritarte a los ojos,
cuando te quiere, y siente dentro suyo...
ideal seria todo, si mi sueño se realizase...
quiero que te enteres,
de este amor platònico,
escrito con deslumbramiento eternos,
yo te adoro,
y demacido...